Descripción
En esta obra maestra la diversión está garantizada: humor negro, sexo explícito, amputación, hemoglobina, guiños a la serie B y un ritmo endiablado que conduce a una escalada de violencia y destrucción como nunca antes se había visto y que nadie ha logrado superar. En palabras de Ratigher, «si fuera escultor, habría perfeccionado la esfera, si fuera director de cine, rodaría el primerísimo de los primeros planos, si fuera los Beatles sería también los Rolling Stones… Pero Mattioli es dibujante de cómics y ha inventado a Squeak the Mouse».